El Fil Verd
Estudi d'arquitectura Elisabetta Quarta Colosso
El Fil Verd es un estudio de arquitectura que trabaja diferentes escalas en los ámbitos de la arquitectura y del paisaje con un enfoque especial hacia la integración con la naturaleza, el bienestar de las personas y la eficiencia energética.
Desarrollamos nuestros proyectos movidos por la búsqueda constante de soluciones innovadoras y eficientes. Los valores de equilibrio, belleza, sostenibilidad, creatividad, responsabilidad, rigor y respeto que nos inspiran se ciñen al compromiso que sentimos hacia el bienestar de nuestros clientes y el impacto de nuestras intervenciones sobre el territorio.
Nuestro enfoque nace de un estudio exhaustivo y científico del contexto que nos lleva a elaborar soluciones proyectuales “integradoras” respecto a la complejidad presente en un proceso creativo.
En El Fil Verd creemos en un proceso de creación del espacio arquitectónico que tenga en cuenta múltiples factores: las personas que fruirán de este espacio, sus necesidades y deseos; el contexto, entendido como entorno urbano o natural con el cual se relaciona el proyecto; el clima que supone un recurso fundamental a la hora de reducir el dispendio de recursos naturales; la salud entendida como creación de un ecosistema armónico y en equilibrio entre edificio, personas y naturaleza; las características propias del espacio arquitectónico, que tendrá requerimientos diferentes según su destinación final.
La consideración conjunta de estos factores se une a la búsqueda de la máxima eficiencia en el uso de recursos naturales y económicos.
El resultado es una solución eficiente, sencilla y altamente satisfactoria para todas las partes que integra la complejidad del proceso creativo en una solución final óptima.
¿Cómo lo hacemos?
- Arquitectura bioclimática: diseñamos y rehabilitamos edificios para que sean energéticamente autosuficientes con el mínimo dispendio de recursos económicos y ambientales.
- Arquitectura vegetal: diseñamos y realizamos jardines, azoteas verdes y paredes vegetadas, que acercan la naturaleza y sus beneficios a los entornos más urbanos.
En nuestros proyectos arquitectónicos apostamos por los conceptos de salud, bienestar y equilibrio con el medio natural y acompañamos a nuestros Clientes en el proceso de desarrollo de sus sueños y necesidades.
¿Quién soy?
Me llamo Elisabetta y desde muy pequeña tuve claro que quería ser arquitecta. Pero no solo esto. Mi conexión con la naturaleza fue fundamental en mi desarrollo y así también la fascinación por las disciplinas que exploran la profundidad del ser humano.
Me crié en medio de la naturaleza y esto me ayudó a tener un enfoque holístico según el cual no se puede considerar una parte sin tener en cuenta el todo. Las personas, la naturaleza, el clima, el propio espacio arquitectónico y su contexto. En la profesión decidí juntar mis tres pasiones: personas, plantas y arquitectura.
Aplico esta visión a un concepto de arquitectura muy personal: crear proyectos que potencien la belleza de los espacios y que tengan en cuenta los múltiples factores en todo el proceso de creación y construcción. Las personas que los disfrutarán, el entorno en el que todo sucede y la naturaleza que ya existe o que puedo aportar. Sin olvidar que somos responsables de este planeta y que todos nuestros actos deberían estar destinados a protegerlo y, a ser posible, mejorarlo.
Sumo mi experiencia profesional y personal a una búsqueda constante de nuevas soluciones en cada proyecto. El resultado es la creación de un hábitat saludable, armónico y en equilibrio entre las personas, las plantas y el espacio arquitectónico.
Belleza, creatividad e innovación son valores que alimentan mi quehacer de cada día.
La belleza es un valor imprescindible para mí. Es un concepto que va más allá de la imagen estética y se refleja en nuestra forma de actuar. Es ser sincero con uno mismo y cuidar del entorno y de los que nos rodean.
Por decirlo con las palabras de Miguel Milà:
“Después de pensarlo mucho llegué a la conclusión de que diseñar consistía en cumplir una función manteniendo la emoción, la emoción estética. Todo aquello que soluciona las cosas con belleza es un buen diseño.”
A veces cuesta ver en la arquitectura aquellas virtudes que valoramos en las personas. La belleza es una de ellas y una de las razones por las cuales aún vale la pena construir.